La empresa Surphase, s.l. fue constituida en 2018 por Iliane Rafaniello y Thomas Schäfer. Ha desarrollado una tecnología que detecta en fase temprana la suciedad que se deposita en las membranas que se utilizan en las desalinizadoras. De esta forma, la limpieza se puede realizar de manera menos agresiva. El dispositivo se puede aplicar en otros sectores, como el de la salud y el oil&gas.
«La financiación es un gran obstáculo y surge curiosamente justo cuando hay que lanzarse»
ILIANE RAFANIELLO | SURPHASE
«Estamos en la fase de pruebas piloto -explica Iliane- y esperamos entrar en actividad a comienzos de 2020. En 2021 el producto ya estará maduro y para instalarlo en cien desalinizadoras. A largo plazo, hasta 2026, esperamos que nuestro equipo sea un elemento estándar al menos en 1.000 plantas».
La principal dificultad a la que se enfrentó esta ‘startup‘ fue adquirir la visión empresarial para desarrollar el negocio. En este sentido, Iliana subraya la ayuda que ha supuesto la participación en los programas de formación de emprendedores organizados por Bic Gipuzkoa, la Spri, la UPV y la Diputación.
Tampoco resultó fácil lograr financiación. «Es un obstáculo grande y, curiosamente, surge justo cuando se está en el momento de lanzarse. Hasta ahora -explica la emprendedora- nos hemos financiado gracias a proyectos de investigación».
No obstante, el mercado que se abre a Surphase se avizora amplio. «Las entrevistas realizadas con distintas empresas han confirmado -asegura la investigadora- que carecen por completo de un método como el nuestro que les permita hacer frente al problema».
Por tanto, su producto puede abrirse camino en las desalinizadoras ya existentes, en las nuevas que se proyecten, así como entre los fabricantes de membranas y productores de detergentes para estas últimas.